La anonimización de datos personales es un proceso crucial que busca eliminar cualquier posibilidad de identificar a la persona titular de dichos datos. Esta práctica se ha convertido en uno de los mecanismos más confiables para salvaguardar la privacidad de las personas. Se considera que una persona es identificable cuando su identidad puede ser determinada de forma directa o indirecta mediante cualquier tipo de información. Para clasificar los datos y su grado de identificabilidad, se siguen estas categorías:
Datos electrónicos (correo electrónico). Datos laborales (puesto, domicilio oficial, correo oficial). Datos patrimoniales (cuentas bancarias, información crediticia). Datos sobre procedimientos administrativos y/o jurisdiccionales. Datos académicos (trayectoria educativa, título, número de cédula profesional). Datos de tránsito y movimientos migratorios (cédula migratoria). Datos sobre la salud (estado de salud, enfermedades contraídas o en curso). Datos biométricos (huella digital). Datos sensibles, especialmente protegidos (vida sexual, religión, origen étnico). Datos personales de naturaleza pública (firmas y fotografía de servidores públicos). |